Cuidar tu salud bucal es Vivir Bien

Sonreír es la medicina que cura el alma

¿Sabías que…?

Los dientes están diseñados para permanecer en tu boca durante toda la vida y solamente existen dos razones para perderlos: las infecciones y  los traumatismos.

Infecciones:
La caries y las enfermedades periodontales son dos tipos de infecciones que pueden hacer que los dientes se caigan. Cuando no se curan las caries los dientes se fracturan desde dentro y si esas fracturas no son reparadas los dientes se pierden por completo. Las enfermedades periodontales son aquellas que afectan a los tejidos que sostienen los dientes, como la gingivitis y la periodontitis, que hacen que estos tejidos se deterioren haciendo que los dientes se muevan o se sientan flojos. Si estas enfermedades no son tratadas por un especialista pueden empeorar hasta que se pierdan los dientes.  

La diferencia básica entre perder los dientes por caries o por enfermedades periodontales es que con las caries los dientes se rompen y se caen a pedazos, en cambio con las enfermedades periodontales los dientes se mueven hasta que se caen enteros.

Para evitar la pérdida dental por cualquiera de estas dos infecciones es recomendable realizar prácticas de higiene bucal cotidianas como cepillarse los dientes, cepillar las prótesis removibles y usar hilo dental. También es importante hacer una auto-exploración de la boca con frecuencia para identificar cambios que se presenten en los dientes y solicitar la atención requerida cuando se identifique algo fuera de lo normal. Hay que tener siempre presente que todas las infecciones son prevenibles.

Traumatismos:
Los accidentes son difíciles de prevenir, pero los golpes también pueden causar la pérdida dental. Esto puede suceder con mayor frecuencia en personas que realizan deportes de contacto (polo, equitación, box, tae kwon do, artes marciales múltiples, entre otros) o actividades de alto riesgo (patinaje, ciclismo de montaña, parkour, entre otros), por lo que siempre se recomienda utilizar protectores bucales y cascos adecuados para la práctica de éstas actividades.

Invertir en la salud de tus dientes es invertir en tu calidad de vida, ya que gracias a ellos realizas tres cosas muy importantes: te alimentas, hablas con fluidez y sonríes. Se ha estudiado que el número de piezas dentales y la capacidad para masticar juegan un papel fundamental en el aumento de la longevidad. Así que si quieres tener un envejecimiento saludable, empieza por ir al dentista para saber cuál es el estado de tu boca y cómo puedes cuidarla mejor en casa, para que tus dientes estén contigo toda tu vida. 

 

Derivado de:
Roberto Carlos Castrejón Pérez. Sólo hay dos razones para perder los dientes.
Disponible en http://saludbucalmx.blogspot.mx/2013/11/sabias-que-solo-hay-dos-razones-para.html