Vacunarse es importante para todos

Prevenir cualquier enfermedad a tiempo es Vivir Bien

Hemos estado acostumbrados por años a que la vacunación corresponde sólo a una etapa de nuestra vida, la de la infancia, como si lo que hiciéramos en esta etapa fuera suficiente para prever la salud durante el resto de nuestras vidas. Nada más alejado de la realidad, la infancia es tan importante como cualquier otra etapa y por tanto la vacunación debe ser permanente y diferenciada, de acuerdo a nuestra edad y estado de salud.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reporta que las enfermedades infecciosas y potencialmente prevenibles mediante la vacunación, siguen estando entre las primeras diez causas de muerte en todos los países, independientemente de su nivel de ingresos. La vacunación a lo largo de la vida permitiría reducir la mortalidad por enfermedades infecciosas prevenibles, las complicaciones y hospitalizaciones, el uso de antibióticos, así como la generación de resistencias a los antibióticos.

Pero hay que tener en cuenta que el sistema inmunológico de las personas responde de manera distinta a las vacuna en función de diversos factores como lo son la edad, el estado de nutrición, el estar padeciendo una o varias enfermedades crónicas, el uso de algunos medicamentos, entre otros. De ahí que para determinar los efectos de una vacuna sea necesario tomar en cuenta el estado fisiológico, patológico y farmacológico de cada individuo.

Cuando acudas al médico:

  • Lo primero y más importante es que haga una valoración de tu estado de salud general.
  • Pregunta cuáles vacunas debes aplicarte
  • Cuáles son los posibles efectos de las mismas
  • No te quedes con ninguna duda. El o la doctora debe explicarte tantas veces como sea necesario para que estés seguro de las vacunas disponibles y benéficas para ti.

Para Vivir Bien debes tener en cuenta que la vacunación puede contribuir en buena medida a promover un envejecimiento saludable, principalmente porque previene enfermedades transmisibles, que si bien no son las presentes en la población adulta y en las personas adultos mayores, (sino que son las enfermedades crónicas no transmisibles), si contribuye a estar en mejores condiciones para hacerle frente a éstas últimas. Como ejemplo, no es lo mismo enfrentar una insuficiencia cardiaca con buena salud en general, que adicionalmente hacerlo con una neumonía que bien pudo prevenirse. Por eso, consulta a tu médico sobre las campañas de vacunación y no te quedes desprotegido ante las enfermedades que sí podemos combatir, ¡Vacúnate!


Derivado de:
Luis Miguel Gutiérrez Robledo, Lourdes García, editores. Vacunación en el Adulto Mayor: Perspectiva de Curso de Vida. México: Academia Mexicana de Medicina. 2015. Organización Mundial de la Salud.
Plan de acción mundial sobre vacunas 2011-2020. OMS; 2013. Disponible en: www.apps.who.int
[1] World Health Organization. The global burden of disease: 2004 uptade. Geneva: WHO; 2008.