Factores de protección para las demencias

¿POR QUE ES IMPORTANTE PREVENIR LA DEMENCIA? En el cerebro de las personas con demencia, ocurren alteraciones bioquímicas que conducen a la muerte neuronal impactando en funciones básicas como su memoria y el reconocimiento de un sitio, culminando en una dependencia total del adulto mayor. Conocer cuáles son los factores de protección para la demencia, apoyara al adulto mayor a iniciar con un cambio en sus estilos de vida como un buen comienzo para la prevención no solo de la demencia y evitar la dependencia.

Mtra. Beatriz Mena Montes

¿POR QUE ES IMPORTANTE PREVENIR LA DEMENCIA?
En el cerebro de las personas con demencia, ocurren alteraciones bioquímicas que conducen a la muerte neuronal impactando en funciones básicas como su memoria y el reconocimiento de un sitio, culminando en una dependencia total del adulto mayor.
Conocer cuáles son los factores de protección para la demencia, apoyara al adulto mayor a iniciar con un cambio en sus estilos de vida como un buen comienzo para la prevención no solo de la demencia y evitar la dependencia.

¿CUÁLES SON LOS FACTORES DE PROTECCIÒN PARA LA DEMENCIA?
Existen factores modificables y no modificables, como el nombre lo indica los factores no modificables son aquellos que no podemos modificar, tal es el caso de la genética de cada individuo. A lo largo de muchos años de investigación se sabe de la protección contra la enfermedad de Alzheimer que tienen los individuos portadores del alelo genético épsilon 2 (ε2) de la apolipoproteìna E, una proteína con la capacidad de transportar colesterol en el cerebro y la variante ε2 tiene mayor afinidad por el colesterol HDL que las otras variantes genéticas.
Para el caso de los factores modificables, tenemos: Ejercicio, dieta y actividades sociales que fomenten la estimulación cognitiva.
DIETA: Se han descrito Patrones dietéticos en los que destaca un mayor consumo de frutas y vegetales frescos, granos enteros, pescado y lácteos bajos en grasas, así como un mínimo consumo de dulces, papas fritas, lácteos con alto contenido graso, carne procesada y mantequilla, con resultados buenos de biomarcadores cerebrales, es así que a partir de nutrientes del tipo “protectores” se puede prevenir la enfermedad de Alzheimer (Berti, et. al, 2015). Igualmente podemos citar al consumo regular de vitamina B12, café, y algunos polifenoles como la Epicatequina derivada del chocolate y el resveratrol derivado de las uvas rojas y presente en el vino como componentes que ayudan en la prevención de la demencia.
EJERCICIO: El adulto mayor pierde la habilidad para hacer cosas aunque no sólo debido a los efectos del envejecimiento, sino parcialmente por el sedentarismo. La OMS, 2016 recomienda 150 minutos semanales para realizar actividades físicas. Es necesario precisar que la actividad física no sólo significa ejercitar deportes, también incorpora actividades recreativas, ocupacionales o de ocio. Se ha visto que el ejercicio mejora la conectividad dendrítica de las neuronas y la estimulación neuronal mediante moléculas como serotonina, dopamina y noradrenalina en modelos experimentales de la enfermedad de Alzheimer.

ACTIVIDADES SOCIALES:
La estimulación cognitiva es un proceso adaptado a las necesidades individuales, consiste en actividades que apoyan el funcionamiento de las distintas capacidades y funciones cerebrales (percepción, atención, razonamiento, abstracción, memoria, lenguaje, procesos de orientación y praxias); si estas actividades se realizan en diferentes períodos de la vida pueden proteger contra la demencia o retrasar la aparición de la enfermedad.
Estudios como el realizado por el proyecto japonés Mihama-Kiho, han trabajado la combinación de la actividad física con la música, y el mantenimiento de una buena función cognitiva en los Adultos Mayores, con resultados positivos (Satoh, et. al., 2014), puesto que la música estimula la sensibilidad, la actividad motriz y motora potencializando por el contacto con otras personas.

Fuentes de consulta:

  • Capìtulo: Mena Montes B, Torres Castro S, Rosas Carrasco O, Luna López A, Espinel Bermúdez MC. Factores de protección para la demencia en adultos mayors en México: ¿dónde estamos?. En el libro: Gerontologìa para la vida active. Una propuesta regional. Editorial Universidad Alas Peruanas y Universidad Estatal del Valle de Toluca Mèxico, 2016. ISBN:978-612-47031-9-5  http://www.unevt.edu.mx/sites/www.unevt.edu.mx/files/files/Perf-Env-Vol2.pdf
  • Berti, V., Murray, J., Davies, M., Spector, N., Tsui, W.H., Li, Y., et. al., (2015). Nutrient patterns and brain biomarkers of Alzheimer's disease in cognitively normal individuals. J. Nutr. Health. Aging.19(4):413-23. doi: 10.1007/s12603-014-0534-0.
  • Satoh, M., Ogawa, J., Tokita, T., Nakaguchi, N., Nakao, K., Kida, H., Tomimoto, H., (2014). The efects of physical exercise with music on cognitive function of elderly people: Mihama-Kiho project. PLoS One. 9(4):e95230. doi: 10.1371/journal.pone.0095230.